La confianza que pone cada pareja en nosotros al escogernos como sus fotógrafos es muy especial. Estaremos presentes desde que inicia el proceso del día de boda, durante los abrazos, lágrimas de felicidad, bailes, momentos íntimos hasta la fiesta y el desmadre, todo el tiempo junto a ustedes en uno de los días más felices y trascendentales de sus vidas.

En las bodas siempre hay felicidad, risas, amor, amigos y nuevas familias que se forman. Presenciarlo nos da esperanza en un mundo donde hay tanta dureza. Valoramos la historia de unión de cada una de las parejas y es inspirador ser testigos de un festejo tan puro.

Para nosotros es emocionante capturar momentos espontáneos que transmitan sentimiento. Nos ilusiona pensar que, muchos años después, los novios puedan evocar las emociones vividas ese día a través de nuestras fotos y de alguna manera se transporten a ese instante